Por Hernán Cortés
Con la novedad de la mudanza del cine Gaumont al complejo Cinépolis Recoleta como sede, durante la mañana del viernes 21 de febrero se presentó la sexta edición de Espanoramas, la muestra de cine español organizada por el Centro Cultural de España en Buenos Aires (CCEBA) y la embajada local. Al igual que años anteriores, el objetivo es acercarle al público porteño un panorama reciente de la cinematografía ibérica, producción que -con excepción de figuras mainstream como Pedro Almodóvar o Antonio Banderas- la cartelera comercial suele pasar por alto. En esta oportunidad la propuesta constará de catorce películas que podrán verse entre el jueves 5 y el miércoles 11 de marzo.
"Esta no es una muestra temática, sino que se trata de tomarle la temperatura al cine español actual", dijo Fran Gayo, progrmador de Espanoramas, durante la presentación. "Notamos que desde el año pasado hay un proceso intermedio entre directores consagrados e independientes. Los cineastas que venían de los márgenes están llegando al gran público. Películas como O que arde (Oliver Laxe), que fue vista por 90.000 espectadores, o La virgen de agosto (Jonás Trueba), que fue estrenada en agosto, lo cual en España es casi un suicidio, y llevó 30.000 personas, marcan un relevo generacional". El curador señaló además que esta renovación viene acompañada de un reciente cambio de autoridades en el ICAA -el instituto cinematográfico español- y una mayor presencia en festivales (en los recientes Róterdam y Berlín hubo, respectivamente, 21 y 9 films españoles).
Además de las películas mencionadas por Gayo, en la grilla se destaca la elogiada La hija de un ladrón, de Belén Funes (premio a la Mejor Dirección Novel en los últimos Goya), que se exhibió en la función de prensa y será el film de apertura. El título sugiere un vínculo tenso entre dos personas , una relación plagada de pases de factura. Los hay, claro, porque Manuel (Edward Fernández) acaba de salir de la cárcel y reaparece imprevistamente en la vida de Sara (Greta Fernández). Pero será un obstáculo más en la asfixiante rutina de esta veinteañera que parece estar sola contra el mundo. Una cámara dardenneana, que prácticamente no se le despega, acompaña con ritmo febril las peripecias de Sara por mantener a su bebé (con un padre de la criatura no muy dispuesto a hacerce cargo) y a su pequeño hermano, saltando de hogar en hogar (prestados), de trabajo en trabajo (precarios), sin un afecto real que le pueda brindar contención. Lo más parecido a ello debería ser Manuel, pero su cercanía implica más coflictos que soluciones. Greta Fernández brilla en un descollante tour de force, secundada por su siempre solvente padre (sí: los Fernández son padre e hija también fuera de la ficción), para un film que expone sin concesiones la vulnerabilidad que sufren algunas mujeres, con el último y conmovedor plano final como síntesis.
Más información y grilla de programación de Espanoramas:
http://www.cceba.org.ar/cine/espanoramas-2020
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