Por Hernán Cortés
¿Es La noche un punzante retrato de la marginalidad nocturna, una suerte de reverso del descontrol tóxico-elitista sobre el que se posaron los medios esta semana? ¿O será un mero ejercicio de estilo compuesto por primerísimos planos sexuales, desenfoques y cámaras subjetivas destinado a la provocación ramplona? La película de Edgardo Castro puede causar ambas impresiones, siempre dependiendo del cristal (y la predisposición) por donde se la mire. Como sucede con cada producción de El Pampero (en este caso, en compañía de Bomba Films), el film contó con mucho ruido previo y seguramente seguirá dando que hablar hasta que culmine el Bafici.
Protagonizada por el propio Castro, La noche propone un tour por el lado (bien) oscuro de Buenos Aires y sus boliches de mala muerte, sus sórdidos albergues transitorios y sus solitarias calles como escenario de pronunciadas resacas. El "guía" es un anodino cuarentón que mitiga su soledad a base de drogas y travestis, a los que sale a buscar a modo de cazador nocturno. En esos raids no habrá euforia, sí mucha angustia y alienación. Calavera no chilla, dicen, pero el protagonista ya no es un pibe y los excesos pasan factura.
Castro tiene el buen tino de cuidar a su personaje: pese a estar bordeando siempre la ilegalidad y el peligro, no es un delincuente. Acaso el extenso plano final sea la clave para comprender un film que, si bien está lejos de ser la "bomba" que andan proclamando en los pasillos, dará suficiente tela para cortar.
- "La noche" se proyecta el martes 19 a las 23:10 hs en Village Recoleta y el viernes 22 a las 21 hs en Village Caballito.
0 comentarios :
Publicar un comentario