Por Hernán Cortés
A sus 76 años, Jacobo Kaplan (Héctor Noguera) siente que su vida se le escurre sin que haya hecho nada relevante. Inmigrante judío que huyó de la Segunda Guerra Mundial, se radicó en Montevideo y formó una familia compuesta por una esposa (la típica idishe mame) y dos hijos (un diligente abogado y un apático escritor), pero eso no es suficiente. La oportunidad de trascender para Jacobo llega por casualidad: al mismo tiempo que la televisión lo informa sobre un criminal nazi oculto en latinoamérica (con un recorrido similar al de Adolf Eichmann), su nieta le comenta la existencia de "un alemán" dueño de un bar en un balneario cercano. Si bien la relación entre ambos hechos resulta algo forzada (pura "generosidad" del guión), este será el punto de partida para que Jacobo intente darle caza al nazi y así pasar a la posteridad.
En Mr Kaplan aparecen tanto el costumbrismo judío retratado infinidad de veces en el cine como el entrañable humor uruguayo (otro ejemplo de estas dos temáticas conjugadas puede ser Acné, de Federico Veiroj), pero la presencia de Wilson (Néstor Guzzini), un ex polícia exhonerado como compañero de aventuras de Jacobo, ponen al film mas cerca de una buddy movie que de una película de segundas oportunidades. En principio, la familia pone a Wilson a cuidar a Jacobo pero pronto veremos que este hombrón tosco necesitará más contención que el anciano (hay algo del Luis Luque de Tiempo de valientes en el personaje de Guzzini).
Aunque la química entre la pareja protagónica no sea cien por ciento fluída (algunos diálogos están muy subrayados), la trama se sostiene a base de las peripecias que padece el dúo para capturar al misterioso alemán. Se agradece que el film esté despojado de la solemnidad con que el cine trata habitualmente los crímenes de guerra, pero para quienes todavía tenemos fresca Remember (la película de Atom Egoyan vista en el último Festival de Mar del Plata, de similar patrón) el final resulta algo previsible. De todas maneras, se trata de un logrado exponente como los que últimamente vienen llegando desde la otra orilla.
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